s numeroso. Sin embargo, es imprescindible dotarlos de más recursos humanos y técnicos, así como mejorar la coordinación entre administraciones para asegurar una atención efectiva a los usuarios.
6. Las personas con lesión medular y otras grandes discapacidades físicas tienen denegado de facto el acceso al sistema sanitario privado, lo que supone una clara vulneración de sus derechos como ciudadanos. Por regla general, las compañías del sector se excusan en un supuesto “sobrecoste” en la atención sanitaria para denegar la contratación de pólizas privadas de salud para este colectivo.
7. Falta de autonomía, frustración, desconfianza y hasta aislamiento social. Las dificultades reales para acceder a productos de apoyo y ayudas técnicas personalizadas son un grave problema al que se enfrentan las personas con discapacidad que precisan de estos productos para el desarrollo de su vida diaria.
8. Impulsar la figura profesional del Asistente Personal, recogida en la Ley de Promoción de la Autonomía Personal y Atención a la Dependencia. Un derecho que garantiza a las personas con discapacidad y/o en situación de dependencia, como lesionados medulares con tretraplejía, su autodeterminación, inclusión e igualdad de oportunidades, permitiéndoles ejercer el pleno control de sus vidas.
En definitiva, ASPAYM Andalucía hace un llamamiento a los poderes públicos para que fortalezcan un Sistema Sanitario Público capaz de responder a las necesidades específicas de las personas con lesión medular y otras discapacidades similares (espina bífida, polio, etc.).
De lo contrario, el colectivo se verá abocado progresivamente al deterioro de su calidad de vida, al aislamiento social y a la pura supervivencia, contraviniendo los principios más elementales de la Declaración de Naciones Unidas sobre los Derechos de las Personas con Discapacidad.